El amor sigue siendo un vacío que encontró su origen.
Todo esto ha sido obra del amor. El amor ha sido y sigue siendo como una angustia que se desmorona, como una congoja que se muere, como una perforación tan emotiva que nos parece prematura, como la precocidad de una calma. Pero ahora el amor le da un báculo a todo lo viviente. Pues todo lo viviente necesita respaldo. Yo soy la apoyatura del arroyo. La base de los verdes. Aplomo de las ondas. Ahínco de los nardos.
Disculpa a lo que muere. Tráelo como si fuera eterno.
Ida Gramcko (Manuscritos inéditos, caja 1, carpeta 11, pág: 30, 54 y 30 respectivamente).
y 14 años sin Valdo.
Rastro de Manuscrito original (carpeta 2). |